Artesanía y gastronomía
La creatividad e historia de los pacenses se manifiesta en la calidad de los productos artesanos de estas tierras. Los encajes y bordados son las estrellas de una oferta basada en la calidad de las materias primas.
La gastronomía de Tierra de Barros y Zafra-Río Bodión es, sin duda, uno de los principales atractivos turísticos de la zona. El legado de las civilizaciones que ocuparon estas tierras sigue vivo en muchos de los platos típicos, como la carne de caza conservada en miel, la sopa de ajo, de origen islámico, o la caldereta, de origen medieval.
Artesanía
Excelentes artesanos mantienen vivas las raíces culturales de la tierra con sus oficios
El viajero no puede abandonar las comarcas de Tierra de Barros y Zafra-Río Bodión sin interesarse por la artesanía de la zona.
En numerosas localidades de estos territorios es posible encontrar excelentes artesanos, que comercian con sus obras ya sea en pequeñas tiendas y mercados con encanto o incluso en sus domicilios.
Las nuevas tecnologías y formas de producción no han conseguido extinguir la artesanía tradicional, pese a que su supervivencia es cada vez más difícil.
Desde las administraciones se intenta preservar y fomentar la artesanía local como expresión de la memoria y cultura material de los pueblos.
Los bollillos, bordados, forjas, tejería, carpintería y alfarería son las actividades más tradicionales de estas comarcas.
Merece la pena invertir en los productos textiles, especialmente en aquellos con bordados y bolillos de las localidades de Villafranca de los Barros
y Almendralejo
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También se trabaja en algunos municipios el cuero, la espartería, y el latón, estas dos últimas heredadas de la cultura del aceite.
Las materias primas en todos estos trabajos son el corcho, el alambre, las juncias, la cuerda, el mimbre, el roble, el naranjo, el castaño, el eucalipto y la encina.
Gastronomía
La carne de caza y los embutidos son los platos fuertes de una variada oferta gastronómica
Saborear la cocina extremeña es un placer que el visitante no debe perderse. La caldereta extremeña de guarrito o cordero, el cocido extremeño, el guarrito frito, el jamón y todo tipo de embutidos son algunos de los platos más recomendados.
Sin olvidar las migas de Tierra de Barros, el gazpacho, los caracoles, los revueltos de espárragos trigueros, la sopa de antruejos, las ancas de rana, la sopa de tomate con uva o melón, el revuelto de setas, el arroz con liebre, las patatas con manitas de cerdo y mondongo, la ensalada templada de bacalao, el escabeche de pescado, el escabeche de conejo, la perdiz a la jara o los pajaritos fritos.
No debe faltar en la mesa el aceite de oliva virgen extra sobre todo de Tierra de Barros; las aceitunas de mesa “manchás”; caldos de la D.O Ribera del Guadiana; y la repostería, caracterizada por platos como roscas fritas, los pestiños o los famosos bollos de chicharrón.
Tres Denominaciones de Origen avalan su calidad: Dehesa de Extremadura, Ribera del Guadiana y Ternera de Extremadura.
Además se apuesta por la producción de alimentos ecológicos, con iniciativas como los huevos de Hornachos
o el vino ecológico en Villafranca de los Barros
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Destino Rural Nº 5
