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Rincones mágicos se prodigan por la naturaleza andaluza, gracias a la calidad y cantidad de sus aguas subterráneas

La importancia medioambiental del agua en Andalucía queda patente en los 20 humedales incluidos en el Convenio Ramsar, es decir, de gran importancia para la aves, aunque existen 145 humedales inventariados, de los que tres cuartas partes están protegidos como espacio natural.

Pero si son importantes los grandes humedales, no lo son menos los ríos y riberas a lo largo de los 45.800 kilómetros que constituyen la red hidrográfica de Andalucía.
También destacan aquellos espacios transformados y generados por el hombre, como los embalses y las balsas de agua.

Aguas subterráneas

Andalucía dispone de 79 grandes presas. Asimismo, también están inventariadas un centenar de pequeñas presas así como más de 16.000 balsas de agua de uso agrícola y que han sido recientemente censadas gracias a imágenes de satélite y fotografías aéreas.

Pero la gran riqueza hídrica de Andalucía se encuentra bajo la superficie gracias a una vasta red de acuíferos que abarca una superficie de casi 50.000 kilómetros cuadrados y que representan más de la mitad de la extensión de Andalucía en 160 grandes masas de aguas subterráneas.

Y, cómo no, las surgencias de estas aguas se han convertido en un gran patrimonio para muchos pueblos y rincones de la geografía andaluza. Desde la más remota antigüedad, el agua ha determinado la edificación de un poblado o el trazado de determinadas rutas.

Conoce tus fuentes

Una de las iniciativas más hermosas es la catalogación popular de todas las fuentes y manantiales de la comunidad autónoma en el proyecto Conoce tus Fuentes. La idea que impulsó ese primer proyecto fue la de rendir homenaje, guardar memoria y resaltar el valor de estas fuentes y manantiales andaluces, verdaderas joyas naturales y culturales del patrimonio común andaluz.

En este momento está plenamente operativa la página web del mismo (www.conocetusfuentes.com ), en la que cualquier persona, asociación o institución puede acceder al catálogo de manantiales de Andalucía y completarlo vía web con los manantiales o fuentes que conozca. El número de estas fuentes y manantiales catalogadas hasta el momento son 4.505, con Málaga a la cabeza de las provincias con mayor número de las mismas: 1.029, a la que siguen Granada con 985 y Jaén con 902.

Manantiales sagrados

Su importancia cultural es enorme. Los manantiales fueron considerados en la antigüedad como manifestaciones de ninfas o diosas, y en la época cristiana muchas veces relacionados con la Virgen por sus frecuentes apariciones junto a sus aguas, veneradas con el alzamiento de ermitas y santuarios. También se ha dotado a las aguas de algunas fuentes de un poder ritual que promueva la fecundidad.

Usos recreativos

Lo más atractivo para el visitante son los usos recreativos y turísticos de este volumen de agua. Ríos y embalses sirven hoy como lugares de esparcimiento de ciudadanos y veraneantes tanto con ánimo deportivo como simplemente recreativo. Pero existen manantiales cuyo valor va mucho más allá: las aguas mineromedicinales y termales.

Andalucía cuenta actualmente con un buen número de manantiales de aguas mineromedicinales, en total más de 200 declarados, siendo la región española con mayor número y caudal de este tipo de aguas. Para muchas localidades han supuesto su transformación en un atractivo destino turístico.

La presencia de tantos manantiales en esta región no es casual: la diversidad hidrogeológica de Andalucía es notable y responde a la gran variedad geológica, geográfica y climatológica de nuestra tierra.

A la presencia de fallas alpinas hay que sumar que la región esté situada en una zona de contacto de placas, que experimenta una actividad sísmica notable y, en general, que presenta gran complejidad tectónica.

Parte de los manantiales de Andalucía, como es el caso de los nacidos en Sierra Nevada, son alimentados por nieves y lluvias, por lo cual tienen un grado de mineralización más débil. Otros, aquéllos que afloran por el contacto de los dominios alpino, bético y hercínico con la gran depresión del Guadalquivir, contienen más minerales.

Andalucía oriental, especialmente la provincia de Granada, suele ser relacionada con las aguas termales, dada su gran riqueza y variedad en manantiales.

Son características las aguas sulfatadas o bicarbonatadas sulfatadas de Cortes y Graena, Villanueva de las Torres o Alhama de Granada. Conviene no olvidar a Lanjarón, caso único porque allí coexisten un gran número de aguas mineromedicinales de muy diversa composición. En otros puntos de Andalucía hay manantiales de menor caudal, pero dotados de una mineralización de gran interés terapéutico: es el caso, por ejemplo, de las excelentes aguas sulfurosas de Carratraca, las aguas carbonatadas de Tolox o las aguas bicarbonatadas de Alhama de Almería.

Y si hablamos de agua y cultura no podemos olvidad al Guadalquivir, el río madre de Andalucía A un lado y otro de este río se ha escrito parte de la historia andaluza, y desde su nacimiento en Quesada (Jaén) hasta su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) recorre 657 kilómetros con cauce navegable en su tramo final, que permite a Sevilla convertirse en un gran puerto de interior.

Fotografía: José Hidalgo © Patronato de Turismo de la Costa del Sol, © Diputación de Granada, © Archivo Entropía, Comunicación y Turismo

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Andalucía: Romance de las aguas cantarinas