Semana Santa en Almendralejo 2015
2015-03-23
La histórica ciudad de Almendralejo cuenta con una Semana Santa que se celebra desde 1609, por lo que puede presumir de una tradición con raigambre. Pero nunca como en la actualidad ha ofrecido un espectáculo tan vistoso y popular gracias al trabajo realizado por hermandades y cofradías que han revitalizado con sus devotas propuestas los ritos de la Pasión.
Las procesiones del Domingo de Ramos incluyen una representación en vivo de la entrada de Jesús en Jerusalén durante la procesión de la Borriquita, con un niño montado en un asno como protagonista y los vecinos engalanados con vestimentas de la época, o procesiones solemnes como el Vía Crucis, los Tres Credos, o este año con la Procesión Magna del Santo Entierro que se celebra cada cinco años. Pero además, para revitalizar la participación popular en estas celebraciones se han impulsado tradiciones antiguas como El Día de los Caramelos, o modernas, como la Ruta de la Tapa Cofrade que cuenta con la participación de empresarios y emprendedores de la localidad que muestran al visitante la calidad de la gastronomía almendralejense. Todo ello unido a los valores turísticos de esta laboriosa ciudad, la sexta de Extremadura en número de habitantes, que han fraguado en asentados recorridos como la Ruta Romántica, los recursos patrimoniales, la Ruta del Vino Ribera del Guadiana, los vestigios arqueológicos de la Edad del Cobre como el sepulcro prehistórico de Huerta Montero o el famoso disco de plata de Teodosio, así como en una amplia oferta de alojamiento y restauración. Esta variada oferta turística apoya la candidatura de la ciudad para que la Semana Santa de Almendralejo sea declarada de Interés Turístico de Extremadura. Según el presidente del Centro de Iniciativas Turísticas, Antonio Díaz Rodríguez, se sabe que ya en 1609 se realizaban procesiones de Semana Santa puesto que una disposición del concejo ordenaba empedrar las calles del centro para que puedan pasar las procesiones de los disciplinantes. De estas procesiones de sangre se pasa a las barrocas, con la aparición del Santo Entierro pocos años después y una profusión de cultos nunca antes vista. Tras una larga etapa de procesiones de la época Moderna se desemboca en el Siglo de las Crisis, donde existen numerosas controversias entre los poderes civil y eclesiástico, en las que Carlos III trata de poner orden a un mundo caótico. Con la llegada de Alfonso XII, la nobleza local comienza a contribuir en la expansión de las devociones penitenciales, siendo el máximo exponente la casa de Monsalud. El moderno estilo de procesionar y el culto a las imágenes actuales data del siglo XX. Existen documentos sobre procesiones en 1910 y de 1927 se posee el primer testimonio documental de la participaciòn de costaleros en Almendralejo de los que se sabe que fueron “unos sesenta”. Puedes leer más en
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