FIO 2014: Extremadura tiende la mano a Japón
2014-02-18
Autor: RV Edipress
La Feria Internacional de Turismo Ornitológico – Extremadura Birdwatching Fair (FIO Extremadura 2014
), considerada la más importante de su género en el sur de Europa, viaja simbólicamente este año desde el Parque Nacional de Monfragüe a Japón. La imagen que ilustra el cartel de 2014 es una estampa de la escuela Ukiyo-e (“pinturas del mundo flotante” o “pinturas del mundo que fluye”), un género de xilografías producidas entre los siglos XVII y XX que incluyen imágenes de paisajes, escenas urbanas o representaciones teatrales, entre otros temas. En concreto, el grabado seleccionado es “Rabilargos en un akebi”, obra de Kono Bairei (1844-1895), pintor, ilustrador de libros y uno de los máximos exponentes del Kacho-e, estilo enmarcado en el Ukiyo-es que se centra principalmente en dibujos de pájaros y flores.
Hacia el este, camino del paraíso: pájaros migratorios Poema hayku de Choshi (1717 – 1768) Los artistas japoneses daban una dimensión espiritual a sus trabajos, al intentar mostrar el alma de las cosas y transmitir de modo sutil y delicado la fugacidad de las estaciones, los cambios de la naturaleza y su eterno ciclo. Una conciencia de aquello que les rodeaba, de los seres vivos que componían un mundo visto desde el prisma zen, adelantada en su tiempo a los movimientos ecologistas que, décadas después, aparecerían en el mundo occidental. Los rabilargos que pintó Kono Bairei se encuentran en la obra Bairei kacho gafu (Book of Flowers and Birds, en la versión en inglés), editada en 1883 en dos formatos diferentes, con cuatro volúmenes y con dos, uno para la primavera y el verano y otro para el otoño y el invierno. Una segunda edición, ya póstuma, se publicó en 1899 y otra serie de este autor nacido en Kyoto y que llegó a ser miembro de la Comisión de Arte de la Casa Imperial japonesa, titulada “Cien plantas con flores”, salió a la luz en 1901. La elección del grabado “Rabilargos en un akebi (una trepadora ornamental cuyo fruto es comestible y que en Japón se conoce popularmente como “el árbol del chocolate”) se debe, en primer lugar, a su potencial gráfico, su belleza y su expresividad, pero también a otras consideraciones no menos importantes. El rabilargo, protagonista de una historia sorprendente Extremadura, a través de la principal feria de turismo ornitológico de España, cuya novena edición se celebrará del 28 de febrero al 2 de marzo, quiere tender la mano a Japón, en particular, y a Asia, en general, como ya hiciera el año pasado con América al elegir una ilustración del naturalista y pintor franco -estadounidense John James Audubon (1785-1851), autor del libro “Birds of America”. Y nada mejor que un rabilargo para ilustrar la unión imaginaria entre el continente asiático y este territorio del occidente europeo. El ave, cuyo tamaño es semejante al de un mirlo pero con la cola muy larga, de plumaje muy bello con alas y cola azules, cuerpo rosado y cabeza negra, encarna uno de los más claros ejemplos de lo que se denomina en ecología una distribución disyuntiva, ya que la población mundial de la especie se reparte entre Asia (norte de Mongolia, sur y sureste de Rusia, este de China, Japón y parte de Corea) y, curiosamente, el suroeste de la península Ibérica, a miles de kilómetros. Rabilargo, cyanopica cyana El misterio de esta distribución se explicó inicialmente con la posibilidad de que lo hubieran traído a esta parte de Europa los navegadores portugueses procedentes de Asia durante el siglo XVI, lo que se creyó durante mucho tiempo. Pero hace algo más de una década se descubrió un fósil de esta especie en una cueva de Gibraltar que se dató en 40.000 años y, poco después, con las nuevas técnicas genéticas, se determinó que en realidad las poblaciones ibéricas y asiáticas se separaron hace entre uno y dos millones de años. Según parece, los rabilargos, en su huida hacia el sur durante la última glaciación, se dividieron en dos poblaciones, una se dirigió al este y la otra al oeste, quedando aisladas definitivamente. Estos estudios ponen de relieve que existen suficientes diferencias genéticas entre ambas poblaciones como para proponer la nueva especie Cyanopica cooki como rabilargo ibérico y Cyanopica cyanos como rabilargo asiático, lo que, no obstante, aún no se ha determinado. De cualquier forma, es un caso apasionante que establece un curioso puente ecológico entre Asia y Extremadura, lo que convierte a esta ave en una de las especies más buscadas entre los miles de ornitólogos y aficionados que viajan hasta nuestra región, uno de los pocos lugares de Occidente donde es abundante. En la edición de 2014, FIO Extremadura 2014
se aproxima a Japón y a toda Asia, unos mercados que ofrecen grandes posibilidades para el turismo de Extremadura y que están más cerca de lo que parece. Como nos recuerda el rabilargo. Puedes leer este artículo también en la revista Turismo Humano 15 Calaméo
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