Turismo de verano en la naturaleza andaluza
La exuberancia y variedad del patrimonio natural andaluz se concreta en la existencia de 2 Parques Nacionales y 24 Parques Naturales, de ellos 9 son señaladas Reservas de la Biosfera por la Unesco. Espacios naturales que enamorarán al viajero por la belleza de sus ecosistemas, su milenaria historia, su suculenta gastronomía y una amplia oferta de servicios.
La diversidad, extensión y riqueza ecológica de los territorios andaluces reúne las cumbres más altas de la Península Ibérica en Sierra Nevada; extensos humedales, espesos y umbríos bosques, desiertos volcánicos y trazos de costa que aún no ha sufrido la intervención humana.
Desde los paisajes de dehesas de encinas y alcornoques, de bosques de castaños y de bosques de ribera del Parque Natural de Aracena y Picos de Aroche en el norte de la provincia de Huelva hasta la hipnotizante aridez y la singularidad de flora y fauna del de Cabo de Gata, con sus magníficas playas vírgenes, en el extremo sur de Almería; desde el espectacular desfiladero que atraviesa Despeñaperros en el norte de Jaén hasta las playas de fina arena blanca, las marismas y la variedad faunística de Doñana.
Flora
El componente más representativo del paisaje natural andaluz es el monte mediterráneo, caracterizado por sus formaciones de encinar. También son típicos los alcornocales en las provincias occidentales, destacando el alcornocal gaditano en la sierra de Grazalema y el Parque Nacional de Los Alcornocales, de donde aún se extrae la mayor producción nacional de corcho. En zonas con climas más templados y húmedos encontramos los quejigos, y, más escasamente los robles. Otros árboles que definen la vegetación andaluza son el castaño, el algarrobo, el acebuche y el olivo silvestre.
Los pinares se encuentran en zonas costeras arenosas y de alta montaña. Merecen especial atención por su singularidad y rareza los bosques de pinsapo, especie de abeto única en el mundo, de alto valor ecológico y que ha merecido su proteción. Los pinsapares se encuentran en la Sierra de Grazalema, en Cádiz y en Sierra Bermeja y Sierra de las Nieves en Málaga.
Fauna
La riqueza animal en el territorio andaluz es muy grande, destacando algunas especies como el águila imperial y el lince ibérico que están siendo objeto de especial protección.
En los parques naturales se organizan excursiones de caza fotográfica para observar de cerca animales como el ciervo, el gamo, el muflón, la cabra hispánica y el jabalí; también es fácil observar los buitres leonados sobrevolando las buitreras.
También se encuentran tejones, comadrejas, zorros, ardillas y otras especies que sólo se crían en el territorio peninsular español como la mangosta andaluza, la cabra montés, el meloncillo, la focha y el erizo moruno. En los ríos andaluces se puede encontrar la nutria y numerosos reptiles.